martes, 31 de mayo de 2016

LA RETAHÍLA

RETAHÍLAS
Las retahílas son expresiones infantiles que se repiten en los juegos y en las relaciones cotidianas de los niños.
Pertenecen a la tradición oral popular, por lo que hay muchas diferencias de unos países a otros y dentro del mismo país de unas regiones a otras.
Las hay de muchos tipos: para sortear juegos, para curar una herida, para contestar a un niño que insulta o que no invita o que te llama mentiroso, etc.


Las retahílas más repetidas son las que se emplean para sortear juegos. En este caso, los niños se colocan formando un corro y todos los niños o sólo uno entona una cantinela mientras va señalando por orden a todos los niños participantes. El último niño señalado es, según lo convenido previamente, el que se libra o el que se queda.

LA COPLA

LA COPLA

La palabra copla, con origen en el vocablo latino copula (entendido en español como “unión” o “enlace”), se emplea para hacer alusión a una estructura métrica. El término se utiliza para identificar al texto poético organizado como una seguidilla y donde se aprecia también una cuarteta de romance o una redondilla, entre otras posibilidades. Esta composición, como sabrán, suele servir de modelo para darle contenido a los cancioneros populares.

Comenzó a cultivarse durante el siglo XVIII en España y posteriormente fue difundida en diversos lugares del mundo, alcanzando una gran popularidad en Latinoamérica. Se componen de cuatro estrofas que pueden contener versos octosilábicos, como el romance (donde el segundo y el cuarto verso riman) o la redondilla (donde el primero y el cuarto riman y también lo hacen el segundo con el tercero) o versos eptosilábicos y pentasilábicos intercalados, como la seguidilla (donde el segundo y el cuarto verso riman).


La estructura métrica asemeja la copla al romance (uno de los géneros más frecuentes de la poesía española). Antonio Machado, Rafael Alberti, Luis de Góngora y Federico García Lorca son algunos de los autores que se acercaron a estas posibilidades poéticas.



LA COPLA ANDALUZA

Se conoce como copla andaluza al tipo de canción que se difundió en España a partir de la década del ’40. Suele tratar sobre la pasión y las emociones. Quienes las interpretan se destacan por su voz potente, con dominio del vibrato, y hacen hincapié en el acento andaluz (aunque el intérprete tenga un origen diferente).
Lamentablemente durante la dictadura de Franco se utilizó este arte como sinónimo de identidad nacional y se lo asoció irremediablemente con el régimen, aunque sus orígenes poco tuvieran que ver con él.
Esto llevó a que en el período de la transición el pueblo se fuera desprendiendo de esta música tan característica, para manifestar su rebelión con respecto a lo acontecido en las últimas décadas en el país; de este modo, la copla quedó relegada a un costado y la música anglosajona vino a ocupar su lugar, robándole toda popularidad.
Algunos de los autores que más supieron destacarse en este género fueron Quiroga, Quintero y León.

En este género se narran historias apasionadas, tristes y llenas de sentimiento; se caracterizan por tener un carácter absolutamente narrativo que se mezcla con la musicalidad para expresar experiencias profundas de encuentros y desencuentros humanos. Se compone de una métrica estructurada de la siguiente forma: ABCB, es decir que la segunda y la última estrofa tienen la misma cantidad de sílabas y similar rima.
A lo largo de los años muchas coplas se han ganado una marcada popularidad, entre ellas podemos mencionar: “María de la O” de León y Valverde, “Torre de Arena” de Gordillo, Sarmiento y Llabrés, “La Zarzamora” y “La Niña de Fuego” de Quintero, León y Quiroga.

EJEMPLO: 

En  la vida hay seis pilares
que tu los debes seguir,
siembra siempre el respeto
y en tu vida se felíz.



martes, 17 de mayo de 2016

LÍRICA EN EL MUNDO LITERARIO!!


QUÉ SON LOS POEMAS
Los poemas son obras escritas en verso, que buscan expresar las emociones o impresiones del mundo para el autor, en donde es común el uso de la rima y otras herramientas del lenguaje. Dentro de los poemas, podemos encontrar aquellos que son épicos, líricos; los hay en forma de odas, dramáticos, de amor, de amistad, etc. Son expresiones líricas, las cuales sujetan una narrativa muy bien estilizada, ya que eso mismo es parte de lo que se busca con la poesía, la belleza y su manifestación a través de la escritura. Es de esa manera, por la cual, los poemas son la fascinación de tantas personas en el mundo y, asimismo, los poetas, los escritores de los mismos, son tan adorados por todas partes.
Ejemplo:
Inquieta
Impetuosa
Arrebatada
Corazón de volcán en erupción
Renunció a su condición de esposa
para ser la amante de Bolívar

Oh "amable loca"
"Libertadora del Libertador"
Fuiste pesadilla muchas veces
pero también ángel de la guarda

Sin tu roce, quemante
y la devoción de tus cuidados
hubiera muerto en Pativilca
o en manos de los lanudos

¡Nunca te olvidarán los puritanos
Autor: Eduardo Pastrana Rodríguez

¿QUÉ ES LA ESTROFA?

La estrofa es el conjunto de versos cuya forma se repite a lo largo de un poema, con características iguales. En la poesía moderna, las estrofas no tienen todos los mismos números de versos, ni la medida ni la rima. Se reconocen porque en la estructura del poema van separadas por un espacio.

Las estrofas clásicas más comunes, son:

- Cuatro versos (cuarteta)
- Cinco versos (quintilla)
- Ocho versos (octava)
- Diez versos (décimas)


QUÉ ES EL VERSO
El verso es la menor división estructurada que encontramos en el poema. Sólo tiene razón de existir cuando se encuentra en función de otro u otros versos, formando parte primero de la estrofa o de la serie y luego del poema. El verso está constituido por oraciones o frases cortas, que se escriben una en cada línea.
Cuando la obra literaria está escrita en verso, la llamamos poema . En cambio, cuando está escrita en prosa, la llamamos prosa poética.

Clases de versos:
Según el número de sílabas, los versos pueden ser:

A- De arte menor:
Son los que tienen ocho sílabas o menos.
B- De arte mayor:
Son los que tienen nueve sílabas o más.

A partir de las doce sílabas, inclusive, los versos se consideran compuestos, es decir, formados por dos versos simples, separados por una cesura.  Cada parte se llama hemistiquio; en el cómputo silábico, los hemistiquios se consideran versos independientes que suman sus medidas. Los siguientes versos, por ejemplo, tienen catorce sílabas y están formados por dos hemistiquios de siete sílabas; el signo // marca la cesura:


Ya no la quiero, es cierto, // pero tal vez la quiero.

Es tan corto el amor, // y es tan largo el olvido. (Pablo Neruda)
3.2- Denominación de los versos
Según el número de sílabas que tenga cada verso, recibe un nombre distinto. Los nombres más comunes son:



 Denominación de los versos
Según el número de sílabas que tenga cada verso, recibe un nombre distinto. Los nombres más comunes son: 



 El ritmo
El ritmo es la musicalidad de un verso. Todo verso simple tiene siempre un acento en la penúltima sílaba y en los versos compuestos aparece un acento en la penúltima sílaba de cada hemistiquio. Este acento fijo en la penúltima sílaba se llama acento estrófico. Todos los acentos de cada verso que coinciden con el signo par o impar del acento estrófico son acentos rítmicos; los acentos que no coinciden con el signo par o impar del acento estrófico son acentos extra rítmicos. Por fin, puede darse el caso de que junto a una sílaba que lleva acento rítmico aparece otra sílaba acentuada, el acento de esta sílaba se llama acento antirrítmico. Este acento es muy importante ya que el poeta puede servirse de él para remarcar una palabra sobre la que quiere llamar la atención.

QUÉ ES LA RIMA

Rima es la igualdad o semejanza de sonidos finales de los versos entre sí. Existen dos tipos de rima:
- Rima consonante
- Rima asonante
 Rima consonante
La rima consonante es aquella que se establece entre los versos cuyos finales, a partir de la última vocal que se pronuncia con acento, son iguales, incluyendo vocales y consonantes.
Ejemplo:
Luna
Cuna
Rima asonante
La rima asonante es aquella que se establece solo en las vocales de los versos a partir de la última vocal acentuada.

Ejemplo:
Sombrero
Viento

ANÁLISIS DEL POEMA

Para comprender este tipo de obra lírica, debemos considerar sus elementos formales. Lo primero que debemos recordar es que los poemas están escritos en verso, y estos, a su vez, están agrupados en estrofas.
Una estrofa, entonces, será un grupo de versos que poseen una cierta medida o que tienen una rima común.
La medida
Es el primer elemento formal del poema. Se refiere a la cantidad de sílabas que compone cada verso y el esquema de las estrofas. Para ello se miden los versos y se asigna una letra a los que riman entre sí; esa letra se representa con minúscula si el verso es de arte menor y con mayúscula si es de arte mayor. A los versos que no riman (versos sueltos) se les asigna una raya o guión (-).

Existe una manera especial de contar las sílabas de un poema. Para hacerlo, debemos considerar los siguientes aspectos: la ley del acento final, la sinalefa e  hiato, diéresis y sinéresis.

Ley del acento final
Todo verso simple tiene siempre un acento en la penúltima sílaba y en los versos compuestos aparece un acento en la penúltima sílaba de cada hemistiquio. Este acento fijo en la penúltima sílaba se llama acento estrófico. Todos los acentos de cada verso que coinciden con el signo par o impar del acento estrófico son acentos rítmicos; los acentos que no coinciden con el signo par o impar del acento estrófico son acentos extra rítmicos. Por fin, puede darse el caso de que junto a una sílaba que lleva acento rítmico aparece otra sílaba acentuada, el acento de esta sílaba se llama acento antirrítmico. Este acento es muy importante ya que el poeta puede servirse de él para remarcar una palabra sobre la que quiere llamar la atención.

El otro procedimiento que debemos considerar cuando contamos las sílabas de un verso, es la ley del acento final. Esta ley señala que -según la acentuación de la última palabra del verso- el número de sílabas se modifica, de la siguiente manera:
- Si la última palabra del verso es aguda, se suma una sílaba al verso. (+1)
- Si la última palabra del verso es grave, el verso no se modifica.
- Si la última palabra del verso es esdrújula, se resta una sílaba al verso. (-1)


Por ejemplo, contemos ahora el siguiente  verso: "Su amor de las entrañas me arranqué".



Como el verso termina con una palabra aguda, le hemos sumado una sílaba. Así, este verso tiene once sílabas.
Otro ejemplo: qué/ ver/des/ es/tán/ tus/ ár/bo/les, (9-1 sílabas)
Como el verso termina en palabra esdrújula le restamos una sílaba. Por lo que el verso tendrá 8 sílabas.

Como el verso termina con una palabra aguda, le hemos sumado una sílaba. Así, este verso tiene once sílabas.
Otro ejemplo: qué/ ver/des/ es/tán/ tus/ ár/bo/les, ( 9-1 sílabas)
Como el verso termina en palabra esdrújula le restamos una sílaba. Por lo que el verso tendrá 8 sílabas.
 La sinalefa
Es un procedimiento que indica que, cuando en el interior de un verso la última sílaba de una palabra termina en vocal, y la primera sílaba de la palabra siguiente comienza en vocal, estas sílabas se cuentan como una sola.



Ejemplo: Contaremos las sílabas del siguiente verso. "Co/mo/ se a/rran/ca el/ hie/rro/ de u/na he/rida/".

En el ejemplo anterior vemos que la palabra "se" termina en vocal "e", y la palabra "arranca" comienza en vocal "a”. Es entonces cuando se produce la sinalefa, y se unen las sílabas formando una sola, como se ve en el esquema. Vemos que lo mismo ocurre al formarse la quinta y la octava sílabas.
Ahora bien, es importante tener en cuenta que cuando una palabra comienza con la letra h, se considera como vocal, ya que siempre después de la h viene una vocal. Recordemos que en nuestro idioma la letra h no tiene ningún sonido. Es por eso que -como se ve en el mismo ejemplo- se produce sinalefa entre la palabra "una" y la palabra "herida", ya que a pesar de la presencia de la letra H, por efectos sonoros, es como si la palabra herida comenzara con E.
Es importante señalar que lo mismo ocurre en versos que incluyen la conjunción "y", como -por ejemplo- "los suspiros son aire y van al aire". Entonces, a pesar de que la letra "y" es una consonante, suena como vocal,de manera que también se produce sinalefa, en este caso, entre la sílaba "re" de aire y la letra "y".

En resumen:
 - Si en un verso encontramos una palabra terminada en vocal y la siguiente palabra empieza también por vocal, debemos contar una  sola sílaba.
-  Si la  letra "Y" suena como vocal, se producirá sinalefa si se cumple la regla anterior, ya que se cuenta como vocal.
- Cuando la palabra comienza con la letra "H", se considera como si fuera vocal, ya que siempre después de la h viene una vocal.
Excepciones: No se forma sinalefa cuando la letra  H va seguida de los diptongos ia, ie, ui, ue, (en cuyo caso, el sonido es como ya, ye, güe, güi).


Licencias poéticas
Cuando el escritor no sigue estrictamente las reglas a la hora de medir los versos, se dice que se ha permitido una licencia poética.


Hiato
Es la licencia poética que hace el efecto completamente contrario a lo dicho para la sinalefa. La causa de que se produzca el hiato o de que no se pueda dar sinalefa , suele ser porque una o las dos vocales que intervienen lleven acento prosódico, o que medie entre ellas una coma(,), un punto y coma(;), punto y seguido(.), puntos suspensivos(…), o por coincidir ahí la cesura(//) de un verso compuesto.

Entonces la sinalefa no se realiza cuando:
- Cuando la segunda vocal es tónica.
Tie - ne - la- ma -ri- po -sa -cua -tro -a -las     (11 sílabas)
Salvador Rueda.
- Cuando hay pausa entre dos palabras.
Yo / soy un / sue/ ño,/ un / im/ po/ si/ ble       (9 sílabas)
En este verso tenemos una coma (,) entre la palabra sueño y la palabra un por lo tanto no se puede realizar la sinalefa aunque una de las palabras termine en vocal y la otra también.

 La diéresis
 Consiste en pronunciar en distintas sílabas (su-a-ve) las vocales de un diptongo (sua-ve). Es la licencia poética por la que se deshace un diptongo cuando queremos obtener una sílaba más en el verso para lograr una métrica armoniosa. A veces se marca con el signo de la diéresis (¨). Ejemplo:

Con/ sed/  in/ sa/ cï/ a/ble  (7 sílabas)
(lo correcto sería: con/ sed/ in/sa/sia/ble, 6 sílabas) para indicar dónde hemos realizado la diéresis poética, como dijimos en la definición,  colocamos sobre la vocal correspondiente (siempre la vocal débil) los puntos de la diéresis gramatical.

La sinéresis
Es el fenómeno opuesto a la diéresis. Consiste en pronunciar en una sola sílaba (o-céa-no, aé-rea) las vocales que forman un hiato (o-cé-a-no, a-é-re-a). Ejemplo:

Y/ yo/ ha/bía/ di/cho/: ¡Vi/ve!, (7 sílabas)
 Es/ de/cir/: a/ma y /be/sa. (7 sílabas)







martes, 26 de abril de 2016

MITO: LOS VOLCANES

MITO DE LOS VOLCANES


Iztaccihuatl, hace ya miles de años, fue la princesa más parecida a una flor, que de la tribu de los viejos caciques del Capitán más gentil se enamoró.

 
  El padre augustamente abrió los labios y dijole al Capitán seductor, que si tomaba un día la cabeza del cacique enemigo, en su vara y lanzón.

Encontraría preparados, a un mismo tiempo el festín de su triunfo y el lecho de su amor.

Y Popocatépetl fuese a la guerra con esta esperanza en el corazón domo la rebeldía de las selvas obstinadas, el motín de los riscos contra su paso vencedor, La osadía despeñada de los torrentes, y la acechanza de los pantanos en traición; y contra cientos y cientos de soldados, años de años gallardamente combatió.

Al fin torno a la tribu, y la cabeza del Cacique enemigo sangraba en su lanzón. Hallo el festín del triunfo preparado, pero no así el lecho de su amor; en vez de lecho encontró el túmulo.

En que su novia, dormida bajo el sol esperaba en su frente el beso póstumo de la boca que nunca en vida la beso Y Popocatépetl quebró en sus rodillas el haz de las flechas; y, en una sorda voz conjuro las sombras de sus antepasados contra las crueldades de su impasible Dios.

Era la vida suya, muy suya, porque contra la muerte la gano; tenía la riqueza; el poderío; pero no tenía el amor... Entonces, hizo que veinte mil esclavos alzaran un gran túmulo ante el sol: amontono diez cumbres en una escalinata como de alucinación; Tomo en sus brazos a la mujer amada, y él mismo sobre el túmulo la coloco; luego, encendió una antorcha, Y, para siempre, quedo en pie Alumbrando el sarcófago de su dolor.


Duerme en paz, Iztaccihuatl; nunca los tiempos borraran los perfiles de tu casta expresión. Vela en paz, Popocatépetl; nunca los huracanes apagaran tu antorcha eterna de amor.

LEYENDA : LA PATA SOLA



 LA PATA SOLA

 Habita entre la maraña espesa de la selva virgen, en las cumbres de la llanura. Con la única pata que tiene avanza con rapidez asombrosa. Es el endriago más temido por colonos, mineros, cazadores, caminantes, agricultores y leñadores.

Algunos aventureros dicen que es una mujer bellísima que los llama y los atrae para enamorarlos, pero avanza hacía la oscuridad del bosque a donde los va conduciendo con sus miradas lascivas, hasta transformarse en una mujer horrible con ojos de fuego, boca desproporcionada de donde asoman unos dientes de felino, y una cabellera corta, despeinada que cae sobre el rostro para ocultar su fealdad.

En otras ocasiones, oyen los lamentos de una mujer extraviada; la gritan para auxiliarla, pero los quejidos van tornándose más lastimeros a medida que avanza hacia la víctima y, cuando ya está muy cerca, se convierte en una fiera que se lanza sobre la persona, le chupa la sangre, y termina triturándola con sus agudos colmillos.

Cuentan los cazadores, que lo que más temen ellos, es el poder que tiene de metamorfosearse y por lo tanto los daños que causa y el engaño que les hace con la pezuña, porque a veces deja el rastro de vaca y otras de oso.
La defensa de cualquier persona que la vea, consiste en rodearse de animales domésticos, aunque advierten que le superan los perros, calificándolos a todos como animales "benditos".
Persigue a los caminantes y cazadores que penetran a sus predios a los mineros que tengan muchas herramientas, porque odia el hacha, la peinilla o el machete. Castiga a los agricultores mandándoles vendavales para destrozar sus plantíos, y más si son de maíz. Se cree dueña y señora de la selva rodeada de fieras y bichos maléficos.

LEYENDA: EL GRITÓN


El GRITÓN.
 
Se dice que es hijo de una india que, expulsada de su tribu, fue sorprendida y poseída en medio de la selva por el demonio. De esta unión nació El Gritón, un ser mitad humano y mitad demonio.
Su terrorífico grito arranca los árboles de raíz, hace temblar la tierra, desbordan los arroyos y atemoriza a los seres que lo oyen. Persigue a los hombres que osan cruzar la selva a media noche

LEYENDA: JUAN LARA



JUAN LARA


Esta historia se origina cuando un joven se enamoró de una muchacha muy bonita del municipio de Sahagún; resulta que había un ánima en pena llamada Juan Lara que también se enamoró de la misma mujer. Cuando iba a visitarla le tiraba tierra en la comida, le tiraba piedras, y toda clase de porquerías. En una ocasión apareció amarrado de pies y manos sobre unas matas de lata y todo sucio de barro. Juan Lara también visitaba a la mujer, le ponía comida y bebida, y aunque nadie lo veía no dejaba nada en los platos; yo ya estaba desesperado por tan incómoda situación, hasta que un día algunas personas le aconsejaron que le cortara el pelo a su novia y así lo hiso y fue tan enorme la sorpresa para Juan Lara que fue el remedio para retirarse de la casa y más nunca se supo de él.




LEYENDA : LA LLORONA

LEYENDAS

LA LLORONA


Una vez una india pobre se enamoro de un joven blanco y rico. El joven la engaño y la embarazo. Cuando la india se vio engañada decidió tener el bebe y dejarlo abandonado en el río. Así fue. La india abandono al bebe. Cuando ella lo quiso ir a buscar en el río, éste se lo había llevado en sus corrientes. Entonces ella lloraba y lloraba y murió de pena moral, dicen los abuelos que cuando un niño hace algo malo esta india se sale y la llaman La Llorona.
Quienes la han visto dicen que es una mujer con la cara huesuda, cabellera revuelta y enlodada, ojos rojizos, vestidos suelos y deshilachados. Lleva entre sus brazos un bultico como de niño recién nacido, No hace mal a la gente, pero causan terror sus quejas y alaridos gritando a su hijo.
 Las apariciones se verifican en lugares solitarios, desde las ocho de la noche, hasta las cinco de la mañana. Sus sitios preferidos son las quebradas, lagunas y charcos profundos, donde se oye el chapaleo y los ayes lastimeros. Se les aparece a los hombres infieles, a los perversos, a los borrachos, a los jugadores y en fin, a todo ser que ande urdiendo maldades.

Este mito es conocido en todas las regiones de Colombia y está generalizado en América, con la diferencia de que cada región tiene su leyenda propia.